Italia sigue avanzando en su camino hacia la completa digitalización del proceso de contratación. En 2014 introdujo la factura electrónica en el entorno B2G. En enero del 2019 fue el primer país europeo en introducir la e-factura obligatoria B2B. Ahora, Italia da un paso más en su estrategia de digitalización introduciendo el pedido electrónico.
Inicialmente el pedido electrónico será obligatorio en el entorno B2G y solo para algunas industrias. Pero el país quiere seguir avanzando en esta dirección en los próximos años.
Primera fase: el sector sanitario
El gobierno italiano ha decidido que el sector sanitario público sea el primero en adoptar los pedidos electrónicos. El Servizio Sanitario Nazionale (SSN) y sus proveedores ya han integrado los pedidos electrónicos en su funcionamiento.
Las transacciones que se deben digitalizar son: la orden de compra (ordine), la orden inicial (ordine iniziale), la orden de reemplazo (ordine sostitutivo), la orden de revocación (ordine di revoca) y la orden pre acordada (ordine pre-concordato).
La adopción de esta nueva tecnología ha sido gradual. Así, la obligatoriedad de usar pedidos electrónicos en los pedidos de bienes entró en vigor el 1 de enero del 2021. Los pedidos electrónicos de servicio no serán obligatorios hasta el próximo año, el 1 de enero del 2022, aunque los proveedores de la administración ya pueden recibirlos, de forma voluntaria, a lo largo del 2021.
Nodo di Smistamento degli Ordini (NSO)
El sistema para la transmisión de los pedidos no será el mismo que el de las facturas. El gobierno italiano ha creado el sistema Nodo di Smistamento degli Ordini (NSO) para que Administraciones Públicas y proveedores intercambien pedidos. Para recibir pedidos electrónicos, todos los proveedores del SSN deben tener una dirección electrónica de NSO.
Los pedidos electrónicos podrán ser transmitidos y recibidos a través de una de estas opciones: portal web, correo electrónico certificado (PEC), interoperabilidad o Peppol.
Una vez más, Italia ha apostado por la transformación digital de sus administraciones y del tejido empresarial del país. ¿Seguirán otros países este modelo, al igual que lo han hecho con la factura electrónica B2B? No dudéis en que os lo explicaremos todo en el blog de Voxel.